A veces solo hacen falta dos días para desconectar de la rutina y reconectar con lo que de verdad importa. Si estás buscando un plan para disfrutar en pareja, lleno de calma, bienestar y un toque de historia, una escapada de spa en Jaén puede ser justo lo que necesitas.
En el Hotel Palacio de Mengíbar, ubicado en el corazón de la provincia, te espera una experiencia de relax total en un entorno donde el tiempo parece detenerse. Un fin de semana perfecto para cuidarte, saborear la gastronomía local y disfrutar juntos del encanto de un lugar con siglos de historia.
Un hotel con alma en el corazón de Jaén
El Palacio de Mengíbar no es un hotel cualquiera. Este edificio histórico, que data del siglo XV, combina el encanto de un antiguo palacio con el confort de un alojamiento moderno. Cada rincón respira historia: desde sus muros de piedra hasta las bóvedas originales que hoy albergan uno de los espacios más sorprendentes del hotel, el spa sobre las antiguas termas romanas.
Aquí, el relax tiene un escenario incomparable. La luz tenue, el sonido del agua y la arquitectura histórica crean un ambiente íntimo y acogedor, ideal para quienes buscan una experiencia única de bienestar en pareja.
Día 1: bienvenida al relax
Llegada al Palacio de Mengíbar
Tu escapada comienza con la llegada al Hotel Palacio de Mengíbar, situado a solo unos minutos de Jaén capital. Desde el primer momento, la tranquilidad del entorno y la elegancia del palacio te harán sentir que estás lejos del ruido y cerca de la calma.
Tras el check-in, podéis disfrutar de un paseo por el casco histórico de Mengíbar, descubrir su plaza mayor o simplemente relajaros en la terraza solárium del hotel mientras tomáis algo. El atardecer tiñe las paredes del palacio de tonos dorados, creando un ambiente perfecto para desconectar del día a día.
Cena en el Restaurante General Reding
Cuando cae la noche, el Restaurante General Reding, ubicado en las antiguas caballerizas del palacio, se convierte en el escenario perfecto para una cena romántica.
Su menú degustación combina productos locales con un toque moderno: aceite de oliva virgen extra, carnes de la sierra, pescados frescos y postres caseros con guiños a la tradición jiennense. Una experiencia gastronómica que completa el plan perfecto antes de una noche de descanso.
Día 2: bienestar y desconexión total
Spa sobre termas romanas: un viaje al pasado
El segundo día está reservado para el relax. El spa del Palacio de Mengíbar es uno de los espacios más emblemáticos del hotel. Construido sobre los restos de unas termas romanas originales, combina historia y bienestar de una manera difícil de encontrar en otro lugar.
Durante vuestra sesión, podréis disfrutar de un recorrido de hidroterapia con piscina climatizada, baño turco, duchas de sensaciones y zona de relajación. Además, el hotel ofrece tratamientos personalizados y masajes en pareja, ideales para completar la experiencia.
Todo está pensado para que desconectéis del estrés y volváis a conectar entre vosotros.
Almuerzo y paseo por los alrededores
Tras la sesión de spa, podéis disfrutar de un almuerzo relajado en el restaurante del hotel o en alguna terraza cercana.
Si os apetece continuar explorando, el entorno de Mengíbar ofrece múltiples opciones:
- Jaén capital, con su imponente catedral y su casco antiguo lleno de historia.
- Los Baños Árabes y el Museo de Arte Íbero.
- O incluso una escapada corta a Úbeda y Baeza, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Por la tarde, nada mejor que volver al palacio para descansar o disfrutar de una copa en el patio principal, bajo las arcadas que han visto pasar siglos de historia.
Día 3: desayuno con encanto y despedida
El último día de la escapada comienza con un desayuno buffet con productos locales: aceite de oliva virgen extra, pan recién horneado, embutidos tradicionales y dulces caseros.
Es el momento perfecto para disfrutar de los últimos instantes en este lugar lleno de calma antes de regresar a la rutina.
Salir del Palacio de Mengíbar siempre deja una sensación especial: la de haber vivido algo más que una simple estancia en un hotel.
Por qué elegir una escapada de spa en el Palacio de Mengíbar
Una escapada romántica no es solo cuestión de destino, sino de sensaciones. Y en el Hotel Palacio de Mengíbar cada detalle está diseñado para que tu experiencia sea inolvidable:
- Entorno histórico y romántico: Un palacio del siglo XV perfectamente conservado, con un ambiente único y elegante.
- Spa con historia: Relájate en unas termas que conservan la esencia del pasado, con instalaciones modernas y acogedoras.
- Gastronomía local: Disfruta de los sabores de Jaén en el Restaurante General Reding, donde tradición y vanguardia se encuentran.
- Habitaciones con encanto: Espacios diseñados para el descanso, con decoración personalizada y todas las comodidades.
- Ubicación ideal: En pleno corazón de Jaén, perfecta para combinar relax, turismo y gastronomía.
Combina relax, gastronomía e historia
En el Palacio de Mengíbar creemos que el bienestar va más allá de un circuito de spa. Se trata de una experiencia integral: descansar, comer bien, desconectar del ruido y disfrutar de la compañía de quien más quieres.
Por eso, nuestras escapadas con spa en Jaén incluyen todo lo necesario para que no tengas que preocuparte de nada. Tú solo tienes que dejarte llevar.
Reserva tu escapada romántica en Jaén
Si buscas una escapada de spa en pareja que combine historia, confort y relax, el Hotel Palacio de Mengíbar te espera con sus ofertas especiales.
Elige tu pack ideal —romántico, relax o gastronómico— y vive un fin de semana diferente en uno de los lugares más mágicos de Jaén.
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Déjate llevar por el encanto del Palacio y vive 48 horas de auténtico relax en un entorno que no olvidarás.